15 mayo 2006

El final es el principio


Esta semana va a ser de infarto. Hasta que se haga oficial la programación del nuevo canal CW, fusión de WB y UPN, no sabremos con seguridad si "Verónica Mars" vuelve para una tercera temporada. Y la verdad, después de ver el final de la segunda entrega, sería una gran pérdida. Es una de las series mejor escritas del momento, incluso con los altibajos que sufren en su segundo año gran parte de los programas que han tenido una primera temporada arrolladora, ya sea a nivel de audiencia o de crítica.
Los guionistas de VM han optado, en lugar de por intensificar los misterios o enreversar aún más los casos (si os fijáis en "Perdidos", los números ya empiezan a cansar), por desarrollar a su personaje protagonista y conseguir que no pierda las cualidades que la hacían tan atractiva. Es algo similar a la opción que tomaron los guionistas de "House", que no sólo no dulcificaron el carácter del doctor, sino que lo acentuaron más en la segunda temporada.

AVISO: Si no queréis saber no sólo cómo termina, sino de qué va la segunda temporada de "Verónica Mars", no sigáis leyendo, porque esto es una SPOILER ALERT.

Y dicho esto, VM no podía tener un mejor cierre de temporada. Se solucionan todos los cabos que quedaban sueltos, Beaver resulta ser un Moriarty del crimen (no hacía falta que fuera tan malo, pero ya se dejó caer en algún episodio anterior. Y seguro que le ha liado alguna a Kendall Casablancas), Aaron Echolls recibe al final su merecido (de una manera muy a lo Soprano), Verónica logra graduarse y la escena final en el aeropuerto tiene un significado realmente interesante, porque representa un tránsito, el principio de una nueva etapa, y no sólo para Verónica, sino también para Wallace.
Quedan muchas preguntas en el aire, aunque el cliffhanger sea esa misteriosa (y tarantiniana) maleta que Kendall le lleva a Keith, y que, sospechamos, provocará que llegue tarde a su cita con Verónica en el aeropuerto (o que no llegue). El futuro de Logan y Verónica, el de Wallace, el de Mac, el de Duncan... ¿Y por qué los padres de Meg ofrecen una recompensa por Woody Goodman? Recordemos que, antes de que se descubriera que la hermana de Meg era la niña maltratada en el episodio 2x07, parecía que era el hijo pequeño de Woody. Mmmm.
Y, para terminar, me pareció realmente interesante cómo se utiliza el olor del bacon frito del desayuno para desencadenar diferentes reacciones en Verónica, reacciones que remiten a su pasado, y no a su futuro. No puedo esperar hasta el mes de septiembre.. ¡¡Aaah!!

3 comentarios:

Edu dijo...

Atentos Spoilers:







Habrá que fiarse de la pista que nos cuelan los guionistas (que ya es coña que las inciales de Clarence Weidman coincidan):

Duncan (por telefono): "CW?"

Clarence Weidman: "It's a done deal."

Esperemos que si, que el trato esté sellado :)

La verdad es que me lo pasé en grande viendo el capitulo, aun siendo un pelin exagerado lo de Beaver. De todas maneras que triste esa frase final "Mi nombre es Cassidy!". Un gran final de temporada, como la anterior. Ahora a esperar.

Anónimo dijo...

Mis predicciones para lo de la maleta:

- Algo relacionado con los Fitzpatricks. Ahora que Cordelia, digo Kendall, es rica, querrá sacárselos de encima.
- Durante todo el tema de las inversiones de Beaver, éste parecía muy seguro de poder manejar a Kendall aunque todo estuviera a su nombre. ¿A lo mejor en esa maleta está la razón?

Lo malo del final de la serie con Beaver en pla Dotor Makigno es que en la 3a temporada (cruzo los dedos para que la haya) ya no sabré si fiarme de los nuevos secundarios que aparezcan, por muy inocentes que aparentemente sean. A ver si hasta Wallace o Mac nos dan una sorpresa.

Unknown dijo...

A mi desde el principio me pareció que las inversiones inmobiliarias de Beaver eran una cortina de humo, algo que escondía otra cosa. ¿Será la maleta?
Y el guiño del "¿CW?-Está hecho" tiene su punto...